Extrema pobreza que no quieren ver políticos como Carlos o Peña
Raymundo Martín Gómez
Muchos quintanarroenses, yucatecos o campechanos viven hoy en la extrema pobreza pese a los promesas de los políticos de sacar adelante al mexicano en forma decorosa, para que vivan su vejez con dignidad, algo que ningún presidente, gobernador o alcalde cumple a cabalidad, según se puede comprobar en esta región peninsular o en cualquier entidad del país.
Don Juan, como le llamaremos a este chetumaleño (FOTO INCLUIDA), camina a diario muchas calles de esta ciudad capital en busca de algún trabajito como chapeo de terenos o que alguna persona le regale algo para comer, beber y sobrevivir en esta angustiosa crisis.
La mayoría de las veces portando playeras ya viejas, descoloridas, que reparten en las campañas políticas donde se ofrece bienestar, este señor a sus casi 70 años es uno de los millones de hombres y mujeres que viven en la extrema pobreza en este país que era rico en petróleo, plata, bellezas naturales, arqueología, minerales, etc.
Y es un doloroso ejemplo de que los llamados "gobierno del cambio" como el de Carlos Joaquín, en Quintana Roo, cada día generan más pobres, en que no se cumplen promesas de bienestar o hasta tratan de callar la verdad silenciando con dinero a los periodistas "para que no publiquen nada en contra" del gobierno o del gobernante en turno, Carlos Joaquín.
¿Cómo o por qué callar estas injusticias si todo está a la vista no sólo en Chetumal, Cancún, Playa del Carmen, Cozumel o cualquier ciudad o pueblo del país? Pero es la realidad que no quiere reconocer Carlos Joaquín, Manuel Alamilla (uno de sus nefastos operadores) o el mismo Enrique Peña Nieto. Pero ahí están, son una prueba de que Quintana Roo, de que México avanza, pero en reversa, hacia atrás, generando más pobreza extrema. Qué pueden decir a su favor. Toda estadística cae ante esta cruel realidad.- Raymundo Martín Gómez, Chetumal, Q. Roo
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