REPORTE/EL CRITICO
Hay gente emprendedora en Chetumal que busca proyectar lo hecho en casa para venderlo entre los consumidores locales e incluso en las entidades vecinas pero encuentra trabas de casi todo tipo, según lo confirman varios casos.
Un ejemplo se da en el Parque de las Casitas, de la Av. Carranza con Morelos, donde productores de coco venden derivados de ese producto como aceite, dulces, etc., o quienes ofertan hasta algo nuevo... pero casi no les compran quienes acuden a desayunar antojitos en esa especie de tianguis.
Los sábados y domingos se instala también en ese lugar don Gregorio (Goyito) y su nieta (FOTO INCLUIDA) quienes ofrecen su producto casero Pil-Pil para darle sabor al pescado. marisco aunque también puede servir para el pollo u otra carne.
Es un aderezo chetumaleño, genuino de Quintana Roo, pero don Goyito vende muy poco, la gente casi no lo compra pese a que es un aderezo sabroso, único, al grado que no lo conocen en Yucatán, Campeche y demás lugares de la región.
Como le sucede también a los que expenden aceite de coco o sus derivados, los compradores locales así no estimulan a los emprendedores a seguir en el negocio, al contrario los desaniman. Lo mismo le sucede al señor que también instala su puesto para vender los novedosos pollos ahumados, cuyas ventas son raquíticas. ¿Cómo romper esta barrera entre productores locales y consumidores? Es una de las muchas preguntas.- L.M., Chetumal, Q. Roo
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